A esta altura nadie duda de la importancia de la educación y de la presencialidad. Pero cuando un dirigente político que tiene a cargo la Ciudad más importante y rica del país no sólo decide desoír un decreto presidencial sino que incluso recurre a la Corte Suprema al menos debería haber extremado las medidas para que esa presencialidad fuera cuidada.

Eso no sucedió y en CABA hay casi "4 mil burbujas pinchadas" a raíz de contagios de docentes o alumnos.

Mientras las autoridades siguen insistiendo en que la escuela no contagia hay 15 familias de trabajadores de la educación que tuvieron que sufrir una muerte.

Desde el canal C5N decidieron hacer un pequeño homenaje a esos trabajadores que dieron literalmente la vida por su trabajo. Mostrándolos uno a uno con nombre, apellido, foto y escuela en la que trabajaban. Muertes absolutamente evitables.