Javier Milei está viviendo el principio de lo que probablemente sea su fin. El pico de crecimiento en su popularidad se da cuando aun falta mucho para las elecciones, y sus propuestas enloquecidas empiezan a encontrar resistencias aun dentro de los comunicadores que antes lo aplaudían.

Los palos le comienzan a llover tanto desde los dirigentes de Juntos por el Cambio que ven amenazados sus votos que daban por seguros y se van al canto de sirenas del libertario, como de sus operadores que lo van esmerilando día a día. Y eso que todavía no comenzó la temporada de carpetazos que le van a llegar cuando se acerque la fecha de las elecciones.

Pero también se siguen escuchando las voces de los votantes del Frente de Todos y sus canales de comunicación, que siempre lo fustigaron y ahora encuentran más terreno fértil para sus cuestionamientos. 

Así Pablo Duggan fue a fondo, y contrastando parte de los argumentos que el líder libertario utilizó en la charla para Perfil que tuvo con Juan Grabois, lo trató de incompetente.