Luis Juez, embajador de Ecuador que estaba de licencia y se encontraba en el país para fiscalizar en las elecciones del domingo para Cambiemos en Córdoba, realizó declaraciones que "ofenden la dignidad del pueblo ecuatoriano y contradicen el respeto y la amistad que deben regir las relaciones entre los dos países". 

El domingo desde el bunker de Cambiemos luego de darse a conocer los resultados, Luis Juez realizó un comentario sobre Ecuador que generó un gran malestar: "Me fui a cambiar la camisa porque no quiero que me digan éste mugriento agarró los hábitos ecuatorianos´".

Desde el gobierno ecuatoriano lanzaron un comunicado oficial donde la viceministra de relaciones exteriores, Lourdes Puma Puma convocó al encargado de negocios de Argentina Carlos Catella, a cargo interinamente de la embajada por la ausencia de su titular, para manifestarle “su enfático rechazo y el disgusto” de Quito por las declaraciones del cordobés.

"La Cancillería del Ecuador encuentra inaceptable que un representante del más alto nivel de un Estado se refiera, una vez más, de manera ofensiva a los ciudadanos del país que le ha recibido con consideración y amistad y en donde su actividad debe estar guiada hacia el fortalecimiento de los lazos políticos, económicos y de cooperación, y no a agraviar reiteradamente a los ecuatorianos."

Ante la repercusión que generó sus dichos, Juez utilizó las redes sociales para dar explicaciones: "solamente con mala fe y una malicia infinita se puede descontextualizar mis dichos intentando hacerme quedar mal con un pueblo al que amo" y agregó que los habitantes del pueblo Otavalo "se visten a la mañana del sábado y están todo el fin de semana con la misma ropa. Me refería a eso, para no estar todo el día con el mismo atuendo pasé por casa a cambiarme".