Al parecer, en la negociación para que Francisco De Narváez se sumara a su equipo, Sergio Massa necesitó soltar la mano de quien se presumía como su colaborador político más directo.

Luego de que se conociera la noticia en la que el líder del Frente Renovador eligiera como candidato para gobernar la Provincia de Buenos Aires a Francisco De Narváez, el jefe de la bancada massista, Darío Giustozzi, hizo notar su disconformidad.

El diputado y exintendente de almirante Brown aseguró que no aceptaría compartir el espacio junto a De Narváez y argumentó que no piensa “acompañar a alguien que no muestra experiencia de gestión”.

Giustozzi se diferenció e intentó mostrarse como un político perteneciente “una nueva generación de dirigentes, que es un papel distinto al de Francisco De Narváez”.

“Hay que poner las cosas claras en la mesa, hacer las cosas con transparencia, elevando la calidad de la política. Tenemos mejores equipos que De Narváez, con más experiencia de gestión”, enfatizó.

“Si me toca competir con De Narváez, si se anima, no hay ningún problema”, anticipó sobre una evidente competencia a nivel interno en las próximas PASO.

El pasado lo condena: cuando De Narváez y Massa se miraban de lejos

Hace tan solo unos meses, el diputado que se acaba de aliar con el Frente Renovador decía que “el massismo es más de lo mismo” y hasta difundía una canción contra el ex intendente de Tigre.