La investigación de la AFIP a Procter & Gamble por sobrefacturación generó una gran repercusión en los medios locales e internacionales.

Lo llamativo es que mientras el Grupo Clarín habló de "ofensiva" de la AFIP, ni siquiera los medios de Estados Unidos tomaron la noticia de esa manera. Una breve repasada por algunos medios de Estados Unidos permite ver que la mayoría tomó la noticia desde un ángulo bien disitnto.

La Administración Federal de Ingresos Públicos suspendió a la empresa Procter & Gamble por fraude fiscal y fuga de divisas a sus firmas vinculadas en el exterior. La multinacional llevaba a cabo operaciones de importación desde Brasil que eran facturadas a través de una filial radicada en Suiza por 138 millones de dólares. Podría ser juzgada por contrabando agravado.

Asimismo la AFIP detectó una diferencia de 19 millones de dólares entre los valores FOB totales de las Declaraciones Juradas Anticipadas (DJAI) y destinaciones de importación asociadas a la DJAI.

En cuanto a Donnelley, el ente recaudador había solicitado que se levantara la quiebra por considerarla "fraudulenta" y que se decretara la continuidad de la explotación.

La salida intempestiva de los dueños de esta compañía podría vincularse con el accionar de los fondos buitre y la puja con el gobierno nacional. Uno de los accionistas dueños de la imprenta era el fondo Blackrock, que había adquirido su participación accionaria de otro fondo buitre, NML Capital, de Paul Singer.