La idea de tener las elecciones prácticamente ganadas llevó al principal espacio de oposición a meterse en una pelea sin cuartel por los cargos y los lugares en las listas, que los llevó a una interna salvaje que los está desangrando.

Porque lejos de las buenas maneras, los golpes ya empiezan a entrar por debajo del cinturón. Como la declaración de la fundadora de la Coalición Cívica que no tuvo ningún reparo en fulminar a Luis Brandoni con un ninguneo atroz.