El operativo, del que también participó el Director Nacional Electoral, Fernando Álvarez, incluyó la realización de los procedimientos de transmisión de los 98.084 telegramas con los resultados de todas las mesas del país y de recepción, carga y totalización de resultados a cargo del Correo Argentino e INDRA S.A.

"Lo importante es que todos los fiscales y el periodismo puedan ver que hay un proceso trasparente que nos da garantías respecto de un resultado provisorio", dijo Pérez a la prensa desde la sede ubicada en la Calle Brandsen al 2000, en el barrio porteño de Barracas, antes de recorrer las distintas áreas operativas.

El funcionario remarcó que el Gobierno se propone mejorar el sistema de carga aunque advirtió que "es lento y viejo" al explicar que "implica mucho traslado físico de los telegramas y eso demora, pero es el que hay y sobre el cual no pueden hacerse grandes innovaciones", y tras insistir en la necesidad de implementar el sistema de boleta electrónica a futuro.

Sobre el escrutinio provisorio de las PASO el 13 de agosto pasado, Pérez señaló: "No hubo problemas, y las demoras fueron porque hubo una elección muy pareja entre dos fuerzas políticas", al referirse a la provincia de Buenos Aires, donde se pudieron conocer los resultados luego de que la justicia llevara adelante el escrutinio definitivo.

"Revisamos el proceso de carga y vimos un patrón de trasmisión que se hace lento sobre el final" indicó Pérez al aclarar que, de todas maneras, "se mantuvo el porcentaje del 4% de telegramas que no se cargan en todos los recuentos provisorios".

Según indicó, el plan de acción que dispuso el Gobierno a través de la Dirección Nacional Electoral para acelerar el proceso fue el de "reforzar la capacitación para las autoridades de mesa y para los fiscales y mejorar la cantidad de centros de trasmisión".

En tanto, Álvarez puso énfasis en los detalles de logística que fueron revisados, como el de planificar que cada camión del Correo recorra menos establecimientos y el nuevo instructivo gráfico que se editó para las autoridades de mesa.

Álvarez advirtió que el escrutinio provisorio "tiene limitaciones estructurales" y que en todos los casos "es la justicia la que debe rectificar un voto anulado" al tiempo que remarcó: "Siempre habrá márgenes de 3, 4, 5% de diferencia".

"Se duplicó el número de empleados que trabajará en la tarea de escaneo para que haya menos errores de escaneo en los centros de trasmisión con dos turnos de 1.200 personas en cada uno", informó.

El director Nacional Electoral puntualizó que habrá "casi 180 fiscales informáticos partidarios para controlar el escrutinio provisorio en las mesas, los centros de trasmisión, en las capitales de provincia y en el Correo".

Para el operativo, que reunió a un total de 3.000 personas en diversos lugares del país, se confeccionaron 98.084 telegramas con datos ficticios que se utilizaron como base de información.

Los materiales fueron distribuidos a los 401 centros de transferencia de datos ubicados en distintos puntos el país desde los cuales se realizó la trasmisión.    

Fuente: Ámbito Financiero