En Polémica en el Bar siempre se quiso replicar de alguna forma lo que sucedía en la calle. Pasaron años, décadas, y el modelo quedó envejecido. Pero aun así continúa en un horario central de la televisión argentina. Ya no hay más humoristas, y al signo de los tiempos la política invade todo.

Para eso se necesita oponer posiciones distintas y algunas voces que floten oscilando entre una postura y la contraria. Para defender al Gobierno apareció Flavio Azzaro, quien siempre fue picante en su faceta de periodista deportivo y no cambió para hablar de política. 

Por eso suele atender sin miramientos a los que sostienen posiciones ligadas a lo más duro de la oposición, como hizo en este caso Chiche Gelblung.