El análisis de Rolando Graña y su equipo no deja mucho lugar a dudas, sobre la brutal noticia de la abrupta caída del consumo de leche en la sociedad Argentina.

El consumo de este alimento básico se desplomó un 15% en enero a comparación de 2023, y preocupa por la salud de los niños argentinos.

Desde el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina, afirmaron que este fenómeno se dio producto de la inflación y el derrumbe del poder adquisitivo.

“La leche contiene lactosa, un azúcar primordial para el desarrollo de las neuronas; proteínas fundamentales para el metabolismo y evitar la anemia; y también calcio, clave para el crecimiento de los huesos”, dijo Fernando Burgos, pediatra, presidente de la subcomisión de Medios y Comunicación de la Sociedad Argentina de Pediatría.

Resulta notorio que, según el mismo informe, los datos de enero muestran una baja interanual alarmante en la producción de leche, del 12,6%, cuando la oscilación usual en esta época del año es 9% a 10%.