El escenario fue la entrega de casas del plan Procrear en Ezeiza donde Alberto Fernández dejó en claro lo que vienen diciendo varios de sus funcionarios desde hace unos días: que el Gobierno no piensa en devaluar.

Y fue aún más allá y habló de minorías que quieren forzar esa devaluación a costa del resto de los argentinos y aseguró que si quieren pelea "les dará pelea".