Imaginá que a esta hora estás en tu casa o en tu laburo o en la calle y los noticieros mostraran imágenes de aviones sobrevolando Plaza de Mayo y bombardeándola.


Sí sí, el hecho más grave de agresión interna contra un Gobierno elegido por el pueblo que no nos hicieron estudiar en la escuela, saliendo de los parlantes de la radio.


¡Plaza de Mayo bombardeada! Hace 60 años. Hoy, un 16 de junio de 1955. Es inimaginable.


Mis viejos tenían 5 años, los que tiene ahora mi hijo. Mi suegro, apenas 3 -los que tiene mi hija-. Mi abuela 36 años, uno menos que el cronista ahora.


¿Cómo les habrán explicado a esos niños lo que pasaba? ¡25 aviones tirando bombas contra inocentes, transeuntes!


Hace 60 años y todavía nos preguntamos cuántos muertos, en este ispa dónde algunos miden la atrocidad en cantidad de heridos. Como si torturar y desaparecer a 8000 tipos o 30000 no sería lo mismo.


Como si el derrocamiento del General Perón pudiera justificarse incluso con el bombardeo. No sabe, no contesta. Pone cara de gorila el hijo de puta.


¿Cuántos se cargaron, 200? ¿2000? No se sabe. Se cargaron al líder y al pueblo peronista todo. Bombardearon de miedo el aire, la plaza, cada barrio, cada pueblo, cada provincia. En nombre de la libertad.


Evita había muerto hacía dos años y pico. Y el blanco ahora era uno solo para aquellos que hicieron y harán política tirando muertos, siempre. No había otro enemigo en el país para el poder del país que el presidente del país.

No había Che Guevara aún -apenas tenía 28 años y viajaba y trabajaba anónimo por el continente-, ni guerrillas ni Guernicas ya, contra qué apuntar.

Entonces cometieron el primer y único bombardeo a una ciudad abierta realizado en el mundo hasta ese entonces ¿Cuántos se cargaron, 200? ¿2000? Todavía no se sabe.

¿Podemos imaginar siquiera el ánimo en la calle, en la feria, en la cancha, a los días del bombardeo y del cambio de gobierno?


¿Cuál sería la sensación de (in)seguridad en ese momento? ¿Se podía salir tranquilo a la calle, ir hasta la esquina o hasta el centro, después de eso?



¿Qué habrán escritos y voceado los medios sobre la instauración de una dictadura que se hizo llamar 'Revolución Libertadora? ¿Qué escribieron de ella y sus actos de gobierno durante 3 años?


¡¿Qué escriben hoy sobre Perón y aquel bombardeo a Plaza de Mayo?!


El sufrimiento de una generación es intransferible a otra, y a otra aún más.


"La historia no perdonará jamás semejante sacrilegio", dijo el General antes de expulsarse a un exilio de 18 años.


"A pesar de las bombas de los fusilamientos, los compañeros muertos, los desaparecidos... ¡no nos han vencido!", canta parte de este pueblo, aún hoy a 60 años.

Y todavía hay quienes preguntan por qué canta parte del pueblo, lo que canta, sin saber cuántos morimos allí.

El otro pedazo de pueblo -el mismo-, no sabe, o no contesta.