Pocas cosas quedan tan grabadas en la memoria de los músicos como las noches en que son abiertamente rechazados por el público. Les ha pasado a bandas que después se consagraron pero que tuvieron que pasar el trago amargo de la reacción negativa de una audiencia que no los estaba esperando.

Pero el tiempo cura las heridas y la tragedia se vuelve comedia. Por eso Ale Sergi se permitió reírse al recordar una de sus primeras presentaciones en un Festival donde esperaban a Babasónicos y aparecieron ellos.