Bajo la dirección de Shahir Daud, el músico Nigel Stanford presentó el videoclip “Cymatics: Science V. Music”, un trabajo en el que se relacionan diferentes sonidos con procesos científicos, de forma que se puede apreciar visualmente el efecto de una forma de onda sobre el fuego o la arena, el sonido que una minitorre de Tesla es capaz de producir, o como una simple corriente eléctrica procesada puede ser una línea de bajo.

Nuestro cerebro tiende a ignorar o dejar en un segundo plano lo que no podemos ver. Pero es un hecho fácilmente demostrable que las ondas de sonido tienen un componente físico que se puede sentir a través de las vibraciones en el aire. Utilizando diversos materiales como la arena, el fuego, el agua o la electricidad, la música cobra vida como nunca antes habías visto.

Todos los experimentos son reales. Algunos se consiguieron con trucos sencillos como colocar arena en una placa metálica sobre un altavoz, y otros exigieron bastante preparación para que el sonido crease el efecto visual necesario para que se complemente con la música. De todas maneras, el propio autor Nigel Stanford confiesa que la música fue escrita después que el vídeo fuese grabado, tomando como referencia los sonidos y las formas creadas por las ondas de audio.