Sobre gustos no hay nada escrito y a esta señora la pizza le gusta con mucha muzzarella. Pero como su pedido le llegó un poco corto de queso llamó para reclamar pero al no recibir una solución decidió llamar a emergencias.

"La ciudadana tuvo un problema con la pizzería debido al poco queso que tenía su pizza; al parecer no le gustó la respuesta del establecimiento y decidió llamar a emergencias (911)", dijo el agente Geoff Higdon, de la policía de la ciudad de Terranova.

Higdon se quedó sorprendido y le dijo que a quien necesitaba era al jefe del restaurante, no a la policía. "No estoy seguro de si llamándonos supuso que podríamos tomar algún tipo de acción, pero por supuesto que se le dijo que lo que necesitaba era hablar con el gerente de la tienda y no con la policía", contó el agente, y agregó: "El 911 es un número solo para emergencias. Uno no puede estar llamando por dedos tropezados y dolores de garganta".