Todo comenzó con una pareja que se desnudó frente al Machu Picchu y difundió el video a través de internet, en donde se los ve corriendo cuesta abajo completamente desnudos, mientras un guardia de seguridad los persigue.

A partir de allí, varios viajeros comenzaron a seguir con esta práctica hasta que se convirtió en una nueva moda que inquieta a las autoridades de Perú.

Por su parte, el director de Cultura Cusco dispuso que se redoble el personal de seguridad en el parque arqueológico “para evitar estos lamentables hechos que atentan contra el patrimonio cultural".