Ocurrió en California, Estados Unidos, donde Angel Anderson, una enfermera especializada en obstetricia de la localidad de Chula Vista, encargó una caja de peras y se sorprendió al ver que una de las frutas orgánicas tenía la forma de un pene erecto.

De esta manera, la mujer presentó una queja ante los productores de la granja orgánica Farma Fresh To You. "No me di cuenta de qué estaba mirando hasta que leí en el recibo que había encargado tres peras. Las otras dos se veían más como deben verse".

Una portavoz de la granja afirmó que no se concentran en cultivar frutas "que se vean perfectas" sino que tengan buen gusto. "La forma que adopte tiene que ver con quien la mira", aclaró Barbara Archer.