"Me dijeron que Osama apreciaba mis notas, que le gustaba mi estilo y que quería conocerme personalmente. Yo dudaba, porque era algo muy peligroso", confesó Abdel Barri Atwan, el periodista que tomó las fotografías.

En aquel entonces, Atwan era director de Al Quds Al Arabi, un semanario, un modesto semanario londinense que había sido muy crítico con la política de los Estados Unidos y con varios gobiernos árabes.

Según comentó el periodista, Osama quería dar a conocer al mundo su guerra con los EEUU y quería obtener el apoyo de los propios países árabes para su campaña anti-estadounidense.

Por eso el periodista viajó hacia las montañas afganas -un lugar donde comenta que a Osama le encantaba estar- y lo entrevistó en uno de sus refugios, donde estaba rodeado de sus hijos y sus más fieles seguidores.

Este material acaba de salir a la luz en el juicio contra Khaled al Fawwaz, acusado de conspirar a favor de los terroristas, que se lleva adelante en Nueva York.