Un brutal femicidio en medio de la pandemia de Coronavirus conmovió a Italia. Se trata del caso de Lorena Quaranta, una doctora de 27 años que fue asesinada por su novio enfermero Antonio de Pace, luego de que éste la acusara de haberlo contagiado el COVID-19.

El hombre, de 31 años, la estranguló hasta matarla. Ambos trabajaban en un hospital de Sicilia, donde luchaban contra el COVID-19.

"Me había pasado el coronavirus y la maté", confesó en el interrogatorio Antonio De Pace, el hombre que cometió el crimen en  la ciudad de Furci Siculo (Messina).

No obstante, la fiscalía italiana descubrió que ambos habían dado negativo en la prueba de coronavirus.

Antes de que fuera asesinada, la doctora Lorena Quaranta había compartido, de viva voz, cuáles eran las condiciones en que los médicos italianos enfrentaban en Coronavirus.

En los días previos a su muerte, Quaranta había estado activa en su página de Facebook, comentando los desafíos que enfrenta el personal médico en Italia.