Paris no descansa en paz. Otra vez la sociedad se convulsionó por un hombre abatido en un destacamento policial, en el que ingresó al grito de: "Alá es grande".
Según fuentes del ministerio del Interior de Francia, el hombre estaba armado con un cuchillo y cargaba un falso cinturón de explosivos.
El hecho ocurrió al norte de la capital francesa donde, luego del episodio, se montó un operativo de seguridad, teniendo en cuenta que la ciudad todavía se encontraba en alerta roja al cumplirse un aniversario del ataque a Charlie Hebdo.

Paris no descansa en paz. Otra vez la sociedad se convulsionó por un hombre abatido en un destacamento policial, en el que ingresó al grito de: "Alá es grande".

Según fuentes del ministerio del Interior de Francia, el hombre estaba armado con un cuchillo y cargaba un falso cinturón de explosivos.

El hecho ocurrió al norte de la capital francesa donde, luego del episodio, se montó un operativo de seguridad, teniendo en cuenta que la ciudad todavía se encontraba en alerta roja al cumplirse un aniversario del ataque a Charlie Hebdo.