Increíblemente, el papa Francisco llamó a un joven de Granada por teléfono luego de que le escriba una carta, para pedirle perdón por los abusos que sufrió en manos de sacerdotes.

Fue tan sólo un día después de que el escrito de Daniel llegue a las manos del Papa el pasado 10 de agosto, pero que se dio a conocer a los medios este martes.

Según expresaron desde el sitio religioso, la conversación fue la siguiente:

- ¿Quién es?
- ¿Hablo con Daniel?
- Sí, soy yo. ¿Quién llama?
- Buenas tardes hijo, soy el padre Jorge.
- Perdón, se ha debido de equivocar, no conozco a ningún padre Jorge.
- Bueno, el papa Francisco.
Silencio.
- ¿Sigue ahí? Hijo, serénate. He leído tu carta varias veces. No he podido más que emocionarme y sentir un dolor inmenso al leer tu relato. Quiero pedirte perdón en nombre de toda la Iglesia de Cristo. Perdona este gravísimo pecado y gravísimo delito que has sufrido. Perdona, hijo mío, tanto dolor ocasionado y tanto como habrás sufrido. Estas heridas hacen que la Iglesia se resienta al completo. Cuentas con todo mi apoyo y el apoyo de toda la Iglesia.

- ¿Quién es?

- ¿Hablo con Daniel?

- Sí, soy yo. ¿Quién llama?

- Buenas tardes hijo, soy el padre Jorge.

- Perdón, se ha debido de equivocar, no conozco a ningún padre Jorge.

- Bueno, el papa Francisco.

Silencio.

- ¿Sigue ahí? Hijo, serénate. He leído tu carta varias veces. No he podido más que emocionarme y sentir un dolor inmenso al leer tu relato. Quiero pedirte perdón en nombre de toda la Iglesia de Cristo. Perdona este gravísimo pecado y gravísimo delito que has sufrido. Perdona, hijo mío, tanto dolor ocasionado y tanto como habrás sufrido. Estas heridas hacen que la Iglesia se resienta al completo. Cuentas con todo mi apoyo y el apoyo de toda la Iglesia.

Cabe destacar, que el arzobispado de Granada suspendió a los curas que denunció el joven y fueron "retirados del ejercicio del ministerio sacerdotal". Además, la justicia española abrió una causa judicial en contra de los acusados.