Recep Tayyip Erdogan habló al respecto en una entrevista con la cadena turca ATV, tras la filtración de supuestas grabaciones de sus conversaciones telefónicas privadas en internet.

"Estamos decididos en este asunto. No dejaremos este país a merced de YouTube y Facebook", aseguró el premier, añadiendo que la prohibición de la plataforma de video y la red social estaba "incluida" entre las medidas previstas. De hecho, Youtube estuvo prohibido en el país durante dos años y fue permitido hace pocos meses.

Las grabaciones -cuya autenticidad no fue confirmada- que se viralizaron en Turquía a través de las redes sociales, vinculan a Erdogan y a sus aliados con casos de corrupción e intentos por controlar los medios de comunicación. La más reciente muestra supuestamente a Erdogan criticando a un periódico por su cobertura y al dueño del diario llorando al final de la llamada.

Las elecciones locales del 30 de marzo próximo serán una prueba para la popularidad del islamista Partido de la Justicia y el Desarrollo de Erdogan, y de ganarlas estaría proscrito el futuro de FB y Youtube en Turquía.