La fuerte tormenta  afectó a la ciudad de Pozzuoli, a las afueras de Nápoles, hiriendo a varias personas y animales y causando destrozos en vehículos y cultivos.

"Bolas de granizo del tamaño de una pelota de béisbol cayeron a una velocidad de al menos 120 kilómetros por hora", informó el meteorólogo Jonathan Erdman.

La magnitud de los daños abarca desde parabrisas rotos hasta destrozos estructurales. También grabaron la tormenta desde el mar y las imágenes resultan impactantes.