Todos, absolutamente todos, nos agarramos la cabeza cuando nos enteramos de que algún ser humano en el mundo contrajo un virus proveniente de un animal y se encuentra hospitalizado. Sobre todo, luego de la pandemia del COVID que comenzó con un murciélago y puso en vilo a la población mundial. 

Este caso fue reportado en Hong Kong, con un paciente que fue hospitalizado el pasado 21 de marzo en el Hospital Yan Chai, con síntomas como fiebre y una disminución de la conciencia. Desde el centro médico informaron que la situación del paciente es “extremadamente delicada”. 

Según las investigaciones, el hombre contagiado accedió a un parque conocido como “la colina de los monos” donde abundan diferentes tipos de simios, y allí se habría contagiado de este virus. Aunque, tal como informaron las autoridades, desde 1932 (cuando se descubrió la enfermedad) sólo 50 personas contrajeron la infección por herpesvirus simiae.

¿De qué se trata el virus B de los monos y cómo se contagia?

Este virus habita en monos y puede ser contagiado a los humanos cuando éstos tienen contacto con los simios. Aunque otros primates más grandes como chimpancés también podrían estar infectados.

El virus se contagia a través de la saliva, el excremento, la orina o el tejido cerebral de los monos. Las autoridades sanitarias del país indicaron que el virus puede sobrevivir durante horas en superficies, especialmente húmedas.

Las personas pueden infectarse después de haber sido mordidas o arañadas por un mono, o cuando el tejido o los fluidos del animal entran en contacto con la piel lesionada de un humano, como por ejemplo mediante un pinchazo o un corte.