Con su tono de jugadora de tenis veterana y canchera de barrio privado cuyo única diversión es hablar mal de los demás, Yanina Latorre se desparramó en su sillón del estudio de Los Ángeles de la Mañana para pegarle a La Chipi, que la había llamado “concha seca”.

La respuesta de Latorre fue de pura agresividad y golpes bajos, primero insultándola y tratándola de poco inteligente, para pasar a contar una supuesta infidelidad que habría tenido durante su participación en el Bailando por un Sueño, y terminar llamándose a sí misma de ‘’señora'' y felicitándose de ‘’tener valores'', mientras de recriminó a la bailarina carecer de ellos.

Pero como no podía ser de otra forma, se metió en el barro sumergiéndose en la grieta para señalar a Pablo Duggan y Julia Mengolini como los instigadores de las frases en su contra, y acusar a todos los kirchneristas de corruptos.