Al menos desde el 2009, los fanáticos esperaban por esta nueva entrega de la saga, aunque en realidad, la del 2003 había sido la última con Arnold Schwarzenegger, que vendría a ser como el alma de “Terminator”, esa historia creada por James Cameron, quien aquí vuelve a intervenir aunque en el guión. “Terminator: Génesis” llegó este jueves con la intención de relanzar la franquicia, y estallar la cabeza de los espectadores.

En el año 2029, John Connor, líder de la resistencia humana, conduce la guerra contra las máquinas. En medio de una batalla que parece ganada, descubre que el programa de inteligencia artificial SkyNet envió un “Terminator” al pasado para matar a su madre, Sarah, poniendo en peligro su presente y el futuro de la humanidad. Por eso, decidirá mandar Kyle Reese a protegerla, en una decisión que cambiará absolutamente todo.

James Cameron regresa a la franquicia, aunque para trabajar con el guión, ya que la dirección quedó en manos de Alan Taylor, quien venía de hacer “Thor 2”. El cineasta a cargo buscó recuperar el espíritu de lo que fueron las dos primeras entregas, y así, apostó a secuencias espectaculares, con guiños a sus predecesoras, no tanto desde lo argumental sino con detalles o frases que se convirtieron en clásicas.

En cuanto a la realización, la utilización de los efectos especiales es impecable. La cinta es un festival de este recurso, a la vez que se trata de una seguidilla de secuencias de acción sin respiro, con situaciones para todos los gustos, incluyendo varias increíbles, que son más que celebradas en este tipo de producciones. Además, están muy bien trabajados los giros temporales, ya que la historia transcurre en cuatro décadas distintas.

Muchos de los guiños mencionados surgen del personaje de Arnold, quien incluso aprovecha para reírse de sí mismo por su vejez. A su papel de héroe, le agrega varias bromas y latiguillos cómicos que suman, sin dejar de ser una actuación aceptable, y nada más. Ojo, para los fanáticos será un lujo volver a verlo en acción, y hasta peleando con su versión de 1984, en una mezcla de utilización de imágenes de archivo, y un gran trabajo de efectos especiales.

Junto al gigante de Schwarzenegger aparecen Jai Courtney y Emilia Clarke, quienes cumplen en sus funciones complementarias, mientras que Jason Clarke, con más chapa, es quien completa y el que termina aportando la mejor actuación del elenco. El papel del australiano irá mutando a lo largo de la cinta, llegando a un villano que le sienta muy bien.

La película no le llega ni a los talones a sus dos primeras entregas, pero como relanzamiento es una gran noticia. Tiene todo lo que puede esperar el espectador, con acción, secuencias espectaculares, entretenimiento y mucho Arnold, de ese Arnold que esperan los fanáticos del héroe de acción. El actor volvió a ponerse el traje de un personaje que lo catapultó a la fama, y cumplió con las expectativas de su público.

¿Hay que verla? Sí, es una gran opción esta semana. La espera valió la pena, ya que con “Terminator: Génesis” se puede disfrutar de una buena entrega de esta franquicia que parece tener más tela para cortar.