Emocionada y contenta Escudero saludó a Nazarena Velez y se dedicó a hablar de su perrita Morena a la que dejó en su casa.

Sin embargo Mariana Brey y Nazarena Velez no le estaban prestando nada de atención ya que ambas quedaron obnubiladas por el vestuario de Escudero que le jugó una mala pasada.

La bailarina primero dudó de sus compañeras de piso hasta que tuvo que acomodarse el escote.