Pasaron “Francotirador”, “La Teoría del Todo”, “El Código Enigma”, y este jueves llegó una biopic más que forma parte de las ocho nominadas al Oscar como “mejor película”. Se trata de “Selma”, un drama histórico que retrata una de las tantas luchas que emprendieron los afroamericanos en Estados Unidos, y que este año cumple su 50º aniversario.

Se trata de otra cinta biográfica, que en este caso se centra en la tarea que emprendió Martin Luther King Jr. en busca de conseguir el Derecho al Voto para los afroamericanos, ley que terminó siendo promulgada en 1965, luego de una conmovedora campaña, que incluyó una movilización desde Selma hasta Montgomery, en el estado de Alabama, en el sur del país.

Ava DuVernay es una joven directora que está realizando sus primeras armas en la industria. De la mano de la producción de Brad Pitt, contó una historia muy apasionante, de una forma tradicional, sin ninguna innovación narrativa ni detalles o planes como para destacar. El trabajo de la cineasta es correcto, sin destellos, y hasta podría criticarse que no explotó del todo una trama muy rica.

De todos modos, DuVernay logró componer un buen trabajo, que retrata de gran forma la crudeza y el sufrimiento de muchísimas personas para poder conseguir un derecho que les pertenecía. Esto lo consiguió a través de una narración lineal, lenta; con mucho diálogo y grandes actuaciones de sus protagonistas, quienes terminan siendo los encargados de enaltecer la cinta.

Aquí aparece David Oyelowo, en un tremendo trabajo interpretando a Martin Luther King. Una excelente actuación, muy natural y similar al personaje real, que bien podría haber merecido una nominación para los Oscar. También se luce Tom Wilkinson, en un papel de menor participación, al igual que Giovanni Ribisi. Y como para completar un gran elenco, Cuba Gooding Jr. y Martin Sheen, con fugaces intervenciones.

Es una buena propuesta, que trae consigo una historia realmente conmovedora y apasionante. En sí, la cinta no deslumbra. No presenta ninguna variante narrativa, sino que se traduce en el simple relato de una trama biográfica. Corre muy por detrás de otras producciones como “Birdman” o “Boyhood” para quedarse con la estatuilla a “mejor película”. De todos modos, viene acompañada por grandes interpretaciones, y la trama en sí, resulta más que atractiva.

¿Hay que verla? En este alud de biopics, “Selma” posee una de las temáticas más interesantes, que hacen que valga la pena verla. Es una película lenta, por momentos algo aburrida, pero una buena propuesta al fin.