Era un hecho desde la asunción de Mauricio Macri: la quita de subsidios producirá una fuerte suba en el precios de los servicios. Eso ya fue formalizado en la energía eléctrica, con un tarifazo que comenzará a efectivizarse desde el lunes 1 de febrero. Ahora siguen el gas y, próximamente, el transporte público.

Con relación al gas domiciliario, el vicepresidente del Instituto Argentino de Energía (IAE), Gerardo Rabinovich, indicó que “el gas va a tener que aumentar porque tiene subsidios importantes que están dentro de la meta del gobierno reducirlos”.

Tras hablar de un "largo de ajuste” en lo que respecta a las tarifas, el experto destacó que "el gas tiene un cargo para el producto importado, que es el que más duele porque cuanto más se consume más sube el cargo en las distintas categorías de consumo residencial”.

En declaraciones a radio La Red, Rabinovich consideró que el servicio “es caro y tuvo ya alguna modificación”, pero señaló que las facturas residenciales “reflejan un precio que se va a ir modificando con el tiempo, porque es bajo para poder encontrar nuevos yacimientos”.