En los primeros siete meses del corriente año, la gestión de Mauricio Macri logró un récord histórico para el país: el déficit comercial acumuló 3.427,6 millones de dólares, el más elevado desde 1910.

Hasta la llegada de este año y del macrismo, que –como lo hiciera Martínez de Hoz– abrió las puertas del país a importaciones indiscriminadas, el peor resultado negativo era el correspondiente a 1994, cuando acumulaba 3.255 millones de dólares de pérdidas para el país. 

La progresión del intercambio comercial apuntaba a que así sucedería: en 2016, el superávit era de sólo 1.020 millones de dólares, bajando con relación a 2015, cuando el intercambio era superavitario en 1.437 millones. Mientras que en 2014, el positivo llegaba a 4.141 millones de dólares.

"Semejante deterioro comercial se explica por una relativa estabilidad de las exportaciones, que crecen a un ritmo tenue del 1,4 por ciento acumulado, mientras que las compras de bienes desde el exterior se incrementan por sobre el 15 por ciento en lo que va del año", sostiene un informe elaborado por la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav).

En el texto citado por Ámbito.com se advierte también que, por este camino, el déficit comercial del 2017 alcanzará los 5.876 millones de dólares, el peor registro anual de la historia económica argentina.