En la convención de la OEA, el gobierno de Estados Unidos pidió respetar las decisiones de sus tribunales ante la pelea con los fondos buitres. Si bien la administración del presidente, Barak Obama, había brindado ante su Corte Suprema el apoyo a la Argentina, en este caso solicitó "no interferir" ante decisiones tomadas por jueces de su país.

Así, la posición de la administración demócrata quedó expresada en una reunión de trabajo de la Organización de Estados Americanos (OEA), en el marco de un encuentro especial por el asunto argentino.

Si bien la convocatoria al encuentro especial de cancilleres -al que se prevé también la asistencia del ministro Axel Kicillof - resultó finalmente aprobado, Washington dejó en claro que se debe respetar la "independencia" del sistema judicial y no obstruir en su tarea.

La 28ª Reunión de Consultas de los cancilleres del hemisferio se realizará el jueves 3 de junio en la sede del organismo, en Washington. Aunque el requerimiento argentino fue aprobado por aclamación, la delegación de Estados Unidos dejó constancia que de haber existido una votación se habría abstenido.

El representante alterno de Argentina ante la OEA, Julio César Ayala, presentó formalmente este lunes el requerimiento oficial ante el Consejo Permanente alegando que se trataba de una cuestión “urgente y de interés común” para los estados americanos.

“Se trata de una cuestión que excede los aspectos financieros y tiene implicancias y consecuencias de índole global”, dijo el diplomático argentino. Antes de la votación, el Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, expresó su solidaridad para con la Argentina y propuso invitar a la Directora Gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) Christine Lagarde, al presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, y al titular del Banco Interamericano de Desarrollo, Luis Alberto Moreno, a la asamblea del jueves y que entreguen allí su punto de vista.