Mercedes Benz iba a producir en la Argentina su pick-up Clase X, para lo cual invertiría 600 millones de dólares en una alianza con Nissan y Renault.

Sin embargo y en vista del escenario económico actual del país, la automotriz de origen alemán decidió suspender esas inversiones y la producción del vehículo.

La decisión de Mercedes fue tomada por sus directivos internacionales “después de revisar el negocio” y los efectos del tipo de cambio, según aclaró la empresa.

La pick-up iba a producirse en la planta de Santa Isabel, en Córdoba, donde se fabrica la Nissan Frontier e iba a producirse la Renault Alaskan, otra camioneta que la automotriz francesa puso en suspenso por la crisis.