La recesión económica ya no se puede esconder abajo de la alfombra del discurso de la corrupción K, la pesada herencia y las mafias laborales. 

Según un relevamiento del Centro de Economía Política de Argentina (CEPA) se cerraron 3198 en total entre diciembre 2015 y marzo de 2017. "La amplia mayoría de las empresas desaparecidas refieren a empresas de menos de 100 trabajadores", añade el informe que publicó esta mañana el diario Tiempo Argentino. 

"Por otro lado, son 107 las empresas que dejan de existir, con un rango de ocupados entre 101 y 2500 trabajadores, mientras que solo hay una baja de cuatro empresas de más de 2500 trabajadores", agrega.

Lo que demuestra que las Pymes son las principales víctimas del modelo 'M', aunque no son las únicas. Y detrás de cada fábrica que se cierra, las historias de cada trabajador que perdió su fuente de ingreso y que debe volver al mercado laboral, que cada vez se contrae más porque las oportunidades escasean. 

En el pormenorizado de cara rubro, la actividad de la construcción perdió casi el 5% de la actividad en este año y medio. En tanto que en el sector agropecuario decreció el 2,5 por ciento.

Las más perjudicadas fueron las micro empresas, que perdieron casi el 3% del padrón, aunque también se observa una brusca caída, del 6%, en el grupo de las firmas que emplean entre 1500 y 2500 trabajadores, continúa el informe. 

Los datos surge de los boletines mensuales de la Seguridad Social que elabora la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), que toman como base las declaraciones juradas que emiten los empleadores con las nóminas de personal asalariado.