“El es un campeón y yo también, sabía que iba a ser una dura pelea”, el reconocimiento de Floyd Mayweather para el Chino Maidana apenas se escuchaba de fondo en el MGM de Las Vegas, producto de la fuerte silbatina que tapaba los dichos del ganador del combate, que tuvo que afrontar la pelea más complicada de los últimos años.

El campeón welter de la AMB y CMB tuvo que soportar los abucheos de una parte de la afición, en desacuerdo con la decisión en mayoría de los jueces (114-114; 117-111 y 116-112).

“Si los aficionados lo quieren ver de nuevo, lo podemos hacer de nuevo”, dijo Mayweather sobre una posible revancha en septiembre.

Mayweather también reconoció que sufrió durante dos rounds por un corte en un ojo que le provocó una piña de Maidana. Aun así, mantuvo su récord invicto, mejorado a 46-0, mientras el Chino quedó en 35-4.