La OMS condenó el accionar de los napolitanos, quienes salieron en malón a las calles tras la obtención de la Copa Italia. 

"El problema sigue ahí y no podemos permitir ver esto en este momento. El virus sigue circulando. Es miserable, duele ver estas imágenes", expresó Ranieri Guerra, subdirector de la OMS, quien incluso los tildó de "desgraciados". 

Alrededor de 5 mil personas abarrotaron la plaza Triestre y Trento, además, otras tantas se amontonaron en la estación de trenes de la ciudad para recibir al equipo. 

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