A los 32 minutos del primer tiempo, el gran partido de la liga italiana entre Milán y Juventus, se quedó sin una de sus figuras y la preocupación se trasladó inmediatamente a la Argentina. Paulo Dybala dejó el San Ciro con una lesión muscular en su pierna derecha y encendió las alarmas de la Selección, ya que es uno de los convocados por Edgardo Bauza para la doble fecha de Eliminatorias de noviembre, ante Brasil y Colombia.

La lesión del cordobés se produjo a los 31 minutos, luego de un intento aislado de romper el cero en Milán. Dybala, enseguida, se sentó en el piso, se bajó las medias y le dijo al árbitro que estaba fuera de juego. Los médicos ingresaron pero no lo atendieron: no había mucho por hacer. Le hicieron preguntas mientras salía de la cancha, pero las respuestas las darán los estudios que le harán al argentino al volver a Turín.

En lo futbolístico no mucho pasó en esos 45 minutos iniciales. La más importante, sin dudas, llegó a los 36 minutos, ya con Cuadrado en cancha por Dybala, cuando el árbitro anuló un gol de Juventus a instancia del asistente que está ubicado detrás del arco. Fue él el que definió el offside que le impedía a Miralem Pjanic gritar su gol de tiro libre.

Pero en el complemento, el local fue mejor y consiguió la victoria por 1-0 con un golazo de Manuel Locatelli, a los 20. Con el triunfo, el local y escolta, se puso a dos puntos de su rival, el único líder del Calcio.