Tras la obtención de la Recopa y la goleada ante Sarmiento de Junín por el torneo local, River viajó a Bolivia con un objetivo claro: debutar con un triunfo en la Copa Libertadores. Los de Marcelo Gallardo arribaron a Santa Cruz de la Sierra donde fueron recibidos con una fiesta.

Remeras, banderas, bombos y platillos fue el cotillón con el que los hinchas bolivianos le dieron la bienvenida a los jugadores, quienes firmaron autógrafos y hasta dieron declaraciones para la prensa local.

El plantel de River permanecerá en Santa Cruz de la Sierra hasta mañana, cuando emprenda su viaje a Oruro para enfrentar a San José a 3800 metros de altura sobre el nivel del mar.