Marcos Fernández aprovechó el permiso que otorgó el gobierno en los últimos cuatro días y viajó de San Juan a su Matilde natal, en Santa Fe. Sin embargo, los vecinos lo obligaron a irse por temor a contagiarse.

El mediocampista de 27 años publicó un descargo en su cuenta de Facebook, en el que señaló la hostilidad de la gente de su pueblo (algunos de ellos vecinos que conocía) que no lo dejaron estar con su familia durante la cuarentena.

"Tristemente nos encontramos con gente a la cual no le cayó bien que yo pueda volver, y se encargó por completo de sacarme (o mejor dicho echarme)". Además, dijo que esas personas "hicieron hasta lo imposible para que sea así, y cuando llegas al punto de hacer hasta lo imposible para querer lastimar a otra persona, es donde te das cuenta lo triste que deben ser estas personas".

Según TyC Sports, allegados al jugador indicaron que dejó Matilde para ir a la capital de la provincia, de donde es oriunda su pareja. "Esto quedará como una anécdota, que me sacaron de mi propio pueblo para felicidad de algunos", escribió más adelante.

El futbolista surgido de Colón de Santa Fe, le dedicó unas palabras a Matilde: "El pueblo en el que me gusta estar, donde siempre fui feliz, donde hay mucha gente a la que quiero y me hace bien verlos, donde quisiera que mi hijo viva toda la vida".