Hoy nos parece gracioso el sólo hecho de pensarlo, pero en su momento hubo un diario de tirada nacional que lo aseguraba. ¿De qué hablamos? De una relación rota entre el técnico 'albiceleste' Alejandro Sabella y los jugadores. ¿De quién hablamos? De Clarín. ¿Quién más?

El Grupo hegemónico y su distorsión de la realidad se hicieron presentes el 4 de junio pasado, luego del anuncio oficial de la lista de 23 jugadores convocados para la Copa del Mundo que se está disputando.

En aquel entonces, destacaba que la desafectación de Ever Banega de la lista "fue una sorpresa para todos y molestó". Además, remarcaba que los más doloridos eran Lionel Messi y Ángel Di María.

Luego, el diario define a Alejandro Sabella como "el padre blando, el que le daba todos los gustos a su niño mimado, el que le permitió jugar con sus amigos, incluso, a contramano de sus deseos (...) Hasta que un día, se puso duro el técnico de la Selección. Y le cerró la puerta del Mundial a uno de los futbolistas más cercanos a la figura. Entonces, algo se rompió. Porque esa relación inmaculada que había entre el entrenador y el plantel, ahora tiene una fisura emocional".

Fisura emocional que nunca se vio en la Copa del Mundo. No confundan el cruce de declaraciones que hubo tras el debut, porque aquellas se referían a una forma de jugar. Declaraciones que no tuvieron faltas de respeto o exabruptos en general.

"Cayó mal y dejó el frente abierto para las especulaciones", agrega el periódico. Luego cita a un allegado X ("una persona que conoce cada rincón del predio") que procura que “hizo todo bien Alejandro. Armó el equipo alrededor de Messi, jugó como quería el pibe, bancó la parada todo el tiempo, incluso no convocando a Tevez. Pero tomó una decisión deportiva en el momento menos indicado".


Para cerrar la nota, Clarín afirma que "Sabella ya no es mirado con los mismos ojos por esos jugadores que están tan convencidos de que Banega tenía que ir al Mundial como el técnico, que debía quedarse en Rosario".

Ahora que la selección marcha mejor que nunca en los ultimos 24 años, se dejaron de lado las críticas, para hacer lugar a los elogios hacia el entrenador nacional, su cuerpo técnico y el plantel.

Total, "si los triunfos acompañan, ninguno le pasará la factura. Así es el fútbol, como la vida misma", concluye el diario opositor.