Justo después del penal fallado por Messi en el minuto 93, Neymar se paró de su asiento en el banco de suplentes y fue a buscar directamente al joven que lo burló durante la victoria 2-1 del Barcelona en el Etihad Stadium de Manchester. 'Ney' intercambió insultos, aunque no lo agredió fisicamente.

Luego de salir del campo de juego, el brasileño no pudo contenerse ante las provocaciones de los hinchas rivales, que le recordaron a él y a su compatriota Dani Alves la dolorosa derrota del Mundial por 1-7 ante Alemania.

El incidente quedó en anécdota después de la intervención de los cuerpos de seguridad, que separaron a Neymar y el seguidor del City, que vestía una camiseta de Touré Yaya y hablaba portugués.

"Estaba jugando con él. Me estaba insultando y yo acabé por reírme de él", declaró Neymar según recoge la prensa brasileña. "No puedo repetir lo que me dijo. Mi madre me dio una educación", agregó al respecto.