El clima de San Pablo ayuda a que el día más importante en los últimos años para la ciudad sea una fiesta. Miles de aficionados llegan al Itaquerão (otro nombre que se le da al Arena Corinthians) sin problemas para el estreno de su Mundial y de la 'verdeamarelha' ante Croacia.

Las estaciones de metro y tren paulista de la empresa CPTM viven una jornada tranquila en comparación con días normales.

El movimiento en las afueras del estadio es intenso, con miles de hinchas manifestando su amor por la 'seleçao'. Las puertas están abiertas al público desde las 13 hs y los aficionados ingresan con tranquilidad, mientras otros optan por aguardar afuera tomándose imágenes y cantando distintas canciones.