De cara a su primer clásico rosarino como jugador de Newell's, el mediático futbolista de 27 años no se anduvo con chiquitas y realizó una osada y jugada promesa en caso de ganar en el Gigante de Arroyito el próximo sábado. 

"La chica con la que estoy no me deja y mi familia tampoco, pero si ganamos el clásico me pongo un bóxer rojo, agarro un bombo y me voy al Monumento a la Bandera a cantar canciones de Newell's", detalló el volante, con el humor que lo caracteriza.