A poco del cierre definitivo del mercado de pases, la puja entre San Lorenzo y Boca por Juan Ramírez llegó a un punto pocas veces visto. El jugador decidió no concentrar con el primer equipo del Ciclón previo al partido con Arsenal como forma de presionar para lograr su salida del club. 

Según trascendió tanto Boca como River están interesados en los servicios del mediocampista. Pero, según denuncian desde Boedo, el que peor se manejó fue el club que conduce Román Riquelme. 

"La manera en la que se manejó Boca no fue la correcta, ya que ellos sabían que el jugador no estaba a la venta. Ellos saben lo que pretendemos. No vendemos un porcentaje menor, sino directamente el 100", dijo Cetto.

También se mostró molesto con el jugador por la forma de manejarse en estos días y comunicar su decisión a último minuto. "Se me acercó a comunicarme esta situación en la tarde del sábado", dijo en el marco del inminente comienzo de la liga profesional de fútbol. 

Para cerrar, dejó claro que "San Lorenzo es un club muy grande para que un jugador no quiera usar la remera. Las condiciones para una salida la vamos a poner nosotros. Legalmente el jugador no tiene nada para reclamar".