El Barcelona, con Lionel Messi y Javier Mascherano como titulares, venció hoy al PSG por 6-1, con tres goles en los últimos ocho minutos, y revirtió la paliza sufrida por 4-0 en el partido de ida desarrollado en París para avanzar a los cuartos de final de la Champìons League en lo que fue una verdadera hazaña.


Luis Suárez, a los tres minutos de juego, y Layvin Kurzawa, en contra de su valla, le dieron al equipo catalán una ventaja de dos goles al cabo de los 45 minutos iniciales.


La esperanza de la parcialidad azulgrana, que colmó el Camp Nou, creció a poco de comenzada la segunda parte cuando Messi, mediante un penal, puso el 3-0. Pero el descuento del uruguayo Edinson Cavani a los 17 pareció frustrar a la multitud y a los jugadores locales que, prácticamente, estaban entregados. 

Sin embargo, un golazo de tiro libre de Neymar, a dos minutos y medio del cierre del tiempo reglamentario, despertó el sueño azulgrana, que creció cuando el brasileño, tras un penal inventado por el árbitro del partido cuando se cumplía el tiempo reglamentario, dejó a su equipo a un gol de la epopeya.


Y ese gol llegó a los 50 minutos cuando Sergi Roberto desvió la pelota tras varios centros al área visitante y desató la locura del público catalán, que vivió una jornada que quedará en la historia de su club y de la máxima competición europea de clubes.


En el elenco parisino Angel Di María arrancó en el banco de suplentes, ingresó a los 10 minutos del segundo tiempo y cuando el partido estaba 3-1 en favor del Barcelona se perdió un gol de esos imposibles de errar que hubiera asegurado la clasificación de su escuadra. En tanto que Javier Pastore se mantuvo todo el encuentro entre los jugadores de reserva.