Ante una desdibujada selección turca, el poderío que le da la tenencia de balón y la certeza en los pases a la selección española fue demasiado para los liderados en la cancha por Arda Turan. Morata y Nolito encarrilaron el triunfo en media hora, y apenas comenzada la segunda parte, el goleador de la Juventus selló cifras definitivas en una conquista que debería haber sido anulada, por posición adelantada de Jordi Alba, en el pase final.

El gran Iniesta fue quien repartió el juego de la 'roja', provocando serios huecos por la banda izquierda, donde la velocidad de Jordi Alba se hizo sentir. La movilidad de Silva y la profundidad de Nolito resumieron en efectividad, la tenencia casi ininterrumpida que proponen los españoles. Turquía sufrió una floja presencia de Arda Turan, su jugador emblema, que estuvo recostado por la izquierda. 

España consiguió avanzar a los octavos de final como líder del Grupo D, mientras que los turcos sin unidades ya no tienen posibilidades se seguir en carrera.