El presidente del 'Porve' denunció que incendiaron una patrulla que tenía apostada frente a su casa, en la localidad de Gerli, como una especie de mensaje mafioso.

El dirigente vinculó el hecho con una fracción de la barra del club, con la que tiene inconvenientes que se vieron agudizados por la crisis deportiva a raíz de tres descensos en los últimos siete años.

Según comentó Enrique Merelas: "El hecho ocurrió este miércoles alrededor de las 5. Escuché una explosión y luego vi el patrullero incendiado y la custodia policial no estaba. Si uno baja los brazos se apodera la mafia".

"Julio Grondona, que es como mi hermano, me dice que no tengo que seguir, que esto no tiene solución. El gobierno y la política utiliza a estos muchachos borrachos y drogados", añadió Merelas.

Pero este no fue el único hecho violento que tuvo como blanco a un dirigente del fútbol argentino, sino que en las últimas horas también balearon la casa del presidente de Chaco For Ever, Héctor Gómez.

Según explicó a la prensa Marcelo Mántaras, el jefe de prensa del club chaqueño, la agresión se puede deber a un disconformismo que existe de parte de los barrabravas porque no pueden acudir a presenciar los partidos que el equipo juega como local en el Torneo Argentino "A".

"Es la tercera vez que sucede una acción como esta en el domicilio del presidente. Ahora fueron dos disparos calibre 22 el el portón de acceso a la casa y el tema parece ser que se les prohíbe el ingreso a los 'barrasa' y solo los socios pueden ver los partidos", explicó Mántaras.