La Championship inglesa, donde el Leeds United de Bielsa es puntero, tuvo una jugada que está dando la vuelta al mundo. 

Bersant Celina fue el protagonista del peor penal pateado de la historia. Resulta que el futbolista la quiso picar -como Messi en la Champions- y terminó siendo el hazmerreír de todos: se resbaló y la pelota apenas se movió para el costado. 

De hecho, uno de los jugadores rivales se rió en su cara por el terrible fallo.