Argentina copó Río de Janeiro como lo hizo en cada ciudad brasileña en donde jugó la Selección. El Maracaná se tiñó de celeste y blanco, y el conjunto de Sabella fue local en el mítico estadio.

Y Fútbol Permitido estuvo allí, viviendo la final de la Copa del Mundo junto a todos los argentinos que alentaron sin parar, y sufrieron con el partido más importante de los últimos 24 años. Mirá las imágenes.