Los catalanes, beneficiarios habituales de los errores arbitrales, esta vez fueron claramente perjudicados. Cuando perdía 2 a 0 y necesitaba un gol para llevar la serie al alargue, un centro de Iniesta pegó en el brazo de Gabi pero el árbitro Rizzoli, a los Ceaballos, decidió cobrar falta fuera del área.

Mirá.