Boca ya estaba clasificado. Pero había mucho en juego. Porque del resultado de su partido, y del otro encuentro del grupo 5, dependía un cruce clave en octavos de final. Si Boca y Wonderers ganaban sus respectivos partidos, El `Xeneixe´y el `millonario´se verían las caras en octavos. Lo que en la previa era solo una posibilidad entre varias, ocurrió. Y salvo que el Corinthians haga 9 goles en los dos partidos que le queden, el superclásico será un hecho.

Boca jugó un PT para el olvido. Con corte de luz incluído, el conjunto de Arruabarrena cedió la iniciativa al conjunto rival y estuvo cerca de estar abajo en el marcador. El arquero Agustín Orión tuvo una intervención clave y Marín salvó una pelota en la línea.

En el ST, la historia fue otra. El equipo de Arruabarena salió a encarar el partido de otra manera. Ya con Gago en cancha y la ambición del juvenil Guido Vadalá, el `Xeneixe´ salió a disputar los 45 minutos finales con más intensidad y comenzó a acercarse al arco rival. Palestino, que necesitaba la victoria para pasar a la siguiente fase, comenzó adelantarse dejando espacios en el fondo; lo que le permitió a Boca llegar al área rival con mayor libertad. Después de varios chances claras, llegó el tanto de Marín, de cabeza. Poco tiempo después, tras un buena jugada armada por Vadalá, Calleri cerró la serie con un remate potente marcando el segundo gol.

Boca cerró la fase de grupos con puntaje perfecto y ahora, empieza a palpitar el cruce de octavos contra River.

Boca cerró la fase de grupos con puntaje perfecto y ahora, empieza a palpitar el cruce de octavos contra River.

Mirá el gol de Marín:

Mirá el gol de Calleri: