El modus operandi de los barras bravas es similar en todos lados: se mueven en grupo y atacan sin razón cuando ven cualquier motivo que despierte su ansia por sangre.

En este caso lo sufrió un joven que tenía puesta una camiseta de Boca y estaba en una plaza de Mendoza descansando, al cual le cayó una lluvia de golpes de barras de Colo Colo que llegaron a la ciudad para ver el partido clasificatorio por la Copa Libertadores.